Lo más importante de todo, la justicia debía ser imparcial; ni los ricos ni pobres debían recibir favoritismo alguno en tribunales (Éxodo 23:2-3 No seguirás a los muchos para hacer mal, ni responderás en litigio inclinándote a los más para hacer agravios; 3 ni al pobre distinguirás en su causa.; Éxodo 23:6 No pervertirás el derecho de tu mendigo en su pleito.; Deuteronomio 1:17 No hagáis distinción de persona en el juicio; así al pequeño como al grande oiréis; no tendréis temor de ninguno, porque el juicio es de Dios; y la causa que os fuere difícil, la traeréis a mí, y yo la oiré.; Proverbios 31:9 Abre tu boca, juzga con justicia, Y defiende la causa del pobre y del menesteroso.). De esa manera, Dios procuraba proteger a los pobres para que no fueran explotados por los que tenían recursos materiales y para asegurar justicia para ellos (véase Deuteronomio 24:14 No oprimirás al jornalero pobre y menesteroso, ya sea de tus hermanos o de los extranjeros que habitan en tu tierra dentro de tus ciudades.).
No hay comentarios:
Publicar un comentario